Gustavo Dulanto jugó los ocho partidos de Sheriff Tiraspol para llegar a la ronda de grupos de la Champions League. (Foto: Sheriff Tiraspol)
Gustavo Dulanto jugó los ocho partidos de Sheriff Tiraspol para llegar a la ronda de grupos de la Champions League. (Foto: Sheriff Tiraspol)

vivió momentos duros en el 2019, cuando defendía la camiseta del entonces Real Garcilaso, tras protagonizar un resbalón en un momento clave del partido ante Deportivo La Guaira, por la fase previa de la Copa Libertadores. El central perdió el balón cerca a su área, la jugada terminó en gol para el rival y significó la eliminación del cuadro cusqueño del certamen.

Aquella situación marcó a Gustavo Dulanto, que puso el pecho como profesional que es mediante un comunicado aceptando su error. Pero igual le llovieron críticas e insultos desde todas partes que el propio defensor contó en Ovación: “Me escribían ‘he perdido 20 soles por tu culpa en mi apuesta’. Veinte soles, yo he perdido mi dignidad en diez segundos. Todo lo que construí desde que debuté en la ‘U’ en 2015 se me fue al tacho porque todos me tacharon por ese error”.

A raíz de eso no tuvo muchas oportunidades de jugar en Real Garcilaso y tuvo que salir al extranjero. Boavista lo fichó en julio del 2019 y a partir de allí empezó a abrirse paso en el fútbol europeo. Gustavo Dulanto jugó en total 11 partidos en el equipo portugués, pero el club no lo tomó en cuenta y le rescindió contrato a poco de iniciar la siguiente temporada. Fue allí cuando apareció la oferta del Sheriff Tiraspol, un equipo acostumbrado a jugar la fase previa de la .

“El hecho de irme a Portugal fue bastante importante. En Garcilaso solo me tocó errar en la Libertadores y fue muy difícil. Apagué el celular, no quería saber nada de nadie, me escribían cosas buenas, pero más eran negativas y no podía creer que haya tanta maldad”, agregó el defensor.

Nuevo comienzo

Con el cuadro moldavo, Gustavo Dulanto asumió el reto más importante de su carrera. Pocos creyeron en su verdadero potencial y hoy es uno de los artífices del éxito del Sheriff Tiraspol, que superó cinco fases para meterse entre los 32 mejor equipos de la Champions League. Hoy, situado en el Grupo D junto al Inter de Milan, el Real Madrid y el Shakhtar Donetsk, el peruano cerró bocas y dejó atrás todos sus fantasmas. Su presente está lleno de elogios y muchos intentan subirse a su coche ganador.

Así, Gustavo Dulanto deja una enseñanza de vida digna de imitar. Es válido tropezar en el camino, pero es obligatorio levantarse para continuar. A sus 25 años, el defensor peruano tiene un futuro a seguir y dependerá de él mismo saber hasta dónde puede llegar. “Sé muy bien que en mi puesto en la selección peruana hay muy buenos elementos. Yo respeto los procesos y mi momento llegará. Lo tomo con calma, pero es un objetivo que tengo”, apuntó.

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