En un partido amistoso entre Cadiz y el Sevilla, las cosas se pusieron calientes luego que el defensor Kike López le metiera un cabezazo al jugador Iago Aspas.
Luego que disputarán una jugada, el primero cometió una falta. Aspas le reclamó, Kike perdió los papeles y le metió tremendo golpe con la cabeza.
El árbitro del partido, Peña Varela, le mostró la roja al agresor y la amarilla a Aspas por avivar la disputa.