El papa Francisco recibió en el Vaticano a las selecciones de Italia y Argentina, que mañana disputarán en Roma un partido amistoso en su honor.
"Será un poco difícil para mí animar a una o a otra (selección mañana), pero por suerte es un amistoso. Y que sea verdaderamente así, os lo pido", dijo el pontífice a las dos delegaciones.
La delegación argentina le entregó una camiseta de la selección albiceleste con el nombre de Francisco y firmada por todos los jugadores y el cuerpo técnico argentino.
Por su parte, la selección de Italia también le entregó al papa una camiseta del combinado azzurro.