Mario Balotelli tuvo un mal desempeño en el partido del Milán ante el Napoli. El propio jugador no se sintió tranquilo con su rendimiento por lo que se pusó a llorar cuando cambiado en el segundo tiempo del juego.
El delantero se sentó en el banco de suplentes y ,aunque intentó disimular sus lagrimas, se pudo ver que estas caían por su rostro.
El partido terminó con triunfo del Napoli por 3-1 sobre Milán.