Ludogorets, club búlgaro de la ciudad de Razgrad, clasificó por primera vez en su historia a la fase de grupos la Champions League, tras un emotivo repechaje ante el Steaua de Bucarest rumano. Cosmin Moti, uno de sus defensores, fue el héroe de la jornada al reemplazar al arquero, convertir en la tanda de penales y atajar dos remates en la misma.
Steaua se impuso por 1-0 en el encuentro de ida jugado en Bucarest, mientras que en la vuelta, en Sofía, Ludogorest se impuso por el mismo marcador, lo que obligó a la tanda de penales. En ella, Moti debió ponerse bajo el arco del cuadro búlgaro, pues el arquero Vladislav Stoyanov había sido expulsado en la prórroga.
Lo de Moti fue sencillamente espectacular. No solo abrió la cuenta en favor de su equipo, sino que además tapó dos penales, siendo el último con el que Ludogorets selló su clasificación. Un sueño hecho realidad.