Un partido de la liga rumana se vio empañado por una brutal entrada que pudo costarle más que la atención médica aGiedrius Arlauskis, arquero del Steaua Bucarest, cuadro donde en 2007 jugara el atacante peruano Andrés Mendoza.
Corrían los 43 minutos del encuentro entre el local Steaua y el Cluj, con triunfo parcial del primero por 1-0, cuando el rival decidió apretar los dientes en busca del empate. Ello fue confundido con violencia por su atacanteSergiu Negrut, quien ante la salida de Arlauskis dejó la pierna en alto.
El desenlace fue brutal, pues el portero quedó tendido retorciéndose de dolor, mientras Negrut también se quejaba para minimizar su acción. Igual no se salvó de la tarjeta roja por tan desleal maniobra.