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Javier Mascherano decidió finalmente su futuro y ya sabe donde jugará las próximas temporadas. Tras semanas de negociación el jugador argentino aceptó la propuesta del Barcelona.
Al 'jefecito' se le terminaba el contrato en 2016 y el club decidió renovarle por dos años más, con una cláusula de rescisión de 100 millones de euros.
Sobre el final de esta temporada Mascherano llegó a decir que no estaba en condiciones para las exigencias del Barcelona, pero desde el club le convencieron que era muy necesario.
Para los dirigentes del Barcelona, el argentino no es sólo importante en el aporte deportivo sino en su peso en el vestuario.