Escribe desde Argentina - Córdoba: Alex Miguel Vásquez El director técnico de Perú, Sergio Markarián, fue sincero e indicó que no puede determinar hoy cómo llegará su equipo para el partido de semifinales ante Uruguay. "No les puedo decir cómo está el equipo mucho menos les puedo decir cómo está el rival. Sé que nosotros tenemos nuestras dificultades, que vamos a tratar de sobrellevarlas. Hay que tratar de armar el mejor equipo posible para esta semifinal, que es inesperada", dijo en conferencia de prensa. Del partido con Colombia señaló que el rival pudo tranquilamente ganar el partido. "Nosotros le ganamos a un equipo que fue el mejor de la primera fase. Le ganamos a un equipo que tenía un funcionamiento casi perfecto y que no había recibido goles. Colombia tiene un entrenador brillante, con experiencia, con espaldas. Este partido nos ha desgastado muchísimo. No puedo contestar cómo será el partido con Uruguay. Esta respuesta va a depender mucho de los restos físicos del equipo", comentó. "El equipo tuvo el carácter y la capacidad de reaccionar tras un mal momento luego del penal. Y es que luego de eso hubieron hasta 10 minutos de confusión en donde pudimos haber perdido el partido. Colombia hizo mucho mérito para ganarlo", agregó. Una gotitas Markarián expresó el deseo de que su equipo tenga algunas chispas del Sporting Cristal de 1997. "Sí, aquel equipo de Sporting Cristal me parece que tenía un alto grado de eficiencia y tenía una expresión estética a partir de la calidad de los jugadores que permitían una expresión bella en el juego. Por momentos aparecen algunas cosas en Perú de ese Cristal pero todavía falta mucho", enfatizó. De los árbitros de la Copa América mencionó: "Yo no quiero abrir ese frente. Abrí ese frente el otro día porque entendí que era necesario. Era necesario que dijéramos que estamos acá, estamos bien. Simplemente lo que hemos tratado de dejar en claro es los mensajes que se expiden desde la gente que manda, no me gustó los mensajes que habían emitido, nada más". "Que yo estoy preocupado, sí, estoy preocupado. Tengo que portarme muy bien, ya vieron que ayer me senté como un santo durante todo el partido. Voy a tratar de bajar al máximo las revoluciones con los árbitros", sostuvo. Finalmente aclaró: "Yo no me creo nada a esta altura de mi vida. Sé que si pierdo un partido el responsable voy a ser yo y todo el mundo me va a cargar a mí, como corresponde. Viene bien que algunos comentarios pongan a Perú en el lugar que nosotros quisiéramos que definitivamente tenga Perú. Quisiéramos que Perú juegue el Mundial de Brasil y que lo juegue enserio. Queda mucho camino por recorrer. Será una Elimintaoria muy difícil".