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A pesar de la goleada recibida en Wembley, los jugadores de la selección peruana no han perdido el entusiasmo, la alegría ni mucho menos la ilusión de defender la camiseta bicolor con la que saldrán hoy a la cancha del Swissporarena de Lucerna, para enfrentar a Suiza. Esta vez Perú no será la reencarnación del Atlético de Madrid, ese equipo ratonero, que usa el contragolpe como veneno letal para hacer daño.
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Para el partido de esta tarde, el técnico Pablo Bengoechea dejará el ultra defensivo 5-4-1 para jugar con un 4-3-3, buscando mayor profundidad y un hombre más en el mediocampo.
Las novedades en este esquema, además de la inclusión de George Forsyth en el arco, serán la presencia de Gianmarco Gambetta al lado de Alberto Rodríguez, en defensa. La inclusión de Christofer Gonzales en la volante para complementar el trío con Cruzado y Ballón, y la aparición del recuperado Cristian Benavente adelante junto a Deza y Carrillo.
Con precisión suiza
Con este esquema de juego el estratega nacional pretende darle más equilibrio al mediocampo para no sufrir al momento del retroceso defensivo. Además, le dará velocidad y buen manejo de balón adelante con tres jugadores rápidos, que compliquen a los recios defensas suizos, que al igual que los ingleses sufren con la pelota jugada al ras del piso.