La certeza de haberlo entregado todo en el campo con la selección peruana e irse del estadio con las manos vacías caló profundo en Jefferson Farfán. Y es que tras el pitazo final, el delantero peruano se dirigió a los vestuarios con lágrimas en los ojos, a vista de sus compañeros.
Al percatarse de la situación, Paolo Guerrero se acercó a Jefferson Farfán para consolarlo y acompañarlo camino a vestuarios. El corazón latía a mil y las emociones afloraban. Había costado tanto lograr la remontada impensada ante Chile, que perderlo dolía el doble.
Jefferson Farfán mostró su lado más humano en la interna del equipo. El jugador más determinante de la selección peruana fue uno de los mejores sobre el campo, marcó dos de los tres goles y se fue aplaudido por la hinchada, que reconoció el esfuerzo dado por la blanquirroja.
“Duele mucho perder así. Teníamos todo controlado. Con un hombre menos se hizo todo más difícil. Los goles que marqué no sirvieron de nada”, declaró Jefferson Farfán a la salida del Nacional, con cara de pocos amigos y con sed de revancha.
La selección peruana cayó anoche por 3-4 ante su similar de Chile en el Estadio Nacional y sumó su segunda derrota consecutiva en el arranque de las Eliminatorias rumbo a Rusia 2018. La próxima fecha, en noviembre, Perú recibirá a Paraguay y luego deberá visitar a Brasil.
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#PerúvsChile: Periodista tildó de "idiota" a #ChristianCueva ►►► http://t.co/fH2Db0WFwQ pic.twitter.com/h7h3gRkZqM— Diario El Bocón (@elbocononline) octubre 14, 2015