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La selección peruana urge de una victoria en el Centenario ante Uruguay sin un buen juego que la respalde. Ante Venezuela no hubo nada, apenas ganas para revertir un marcador en contra, lo que llega a ser meritorio en una pichanga; pero no en un duelo de alta competencia y por una Eliminatoria para una Copa del Mundo. Ricardo Gareca, el técnico de la blanquirroja, intentó maquillar el pésimo resultado bajo la premisa de destacar la respuesta anímica ante el 2-0 en contra. No consideró, por obvias razones, que Perú padeció de una idea de juego, que jugó al pelotazo y que los goles, aunque se concretaron por mérito propio, se dieron por errores del rival. 

Este martes la selección peruana visitará a un endemoniado Uruguay con cuatro bajas obligadas: Carlos Zambrano y Josepmir Ballón por acumulación de amarillas y Juan Manuel Vargas y Jefferson Farfán por lesión. Cuatro titulares en posiciones claves. A eso se suma el cambio obligatorio de Carlos Ascues, quien ante la vinotinto padeció por los 126 días sin hacer fútbol de alta competencia. Todo ello obligará al argentino a improvisar una línea defensiva. Quizá con Ramos y Rodríguez como zagueros centrales, dos jugadores que en cuestión de seguridad son una moneda aire.

En mediocampo, Ricardo Gareca parece haber convocado a Cristian Benavente solo para acompañar al equipo. No lo considera pese a su buen momento en Bélgica. Optaría por Andy Polo por derecha. Balbín y Vílchez serían la nueva contención, aunque podría repetir a Tapia. En ataque, volvería a contar con Claudio Pizarro aunque ya está más que demostrado que solo estorba a Paolo Guerrero cuando juegan juntos. La selección peruana es un manojo de dudas e improvisaciones horas antes de pisar el Centenario. Así, difícil sacar un buen resultado.

Ricardo Gareca 'quemó' todo ante Venezuela. Se equivocón. Insistió con Carlos Ascues pese a que llevaba 126 días sin jugar y lo premió con titularato. Ascues respondió a la confianza con un penal por cruzar a destiempo y perdiendo la marca para el 0-2 en contra. Una lágrima. El argentino también premió a Jefferson Farfán con la titularidad, pese a llevar 117 días sin jugar. La 'Foquita' fue un fantasma en el campo: no sumó, ni restó. Solo estuvo allí. Volvió a confiar en Claudio Pizarro, quien pudo ser un arma más letal jugando los últimos 20 o 30. A los 37 años no puede ser dinamita por noventa minutos, menos en un equipo como la selección peruana donde necesariamente debe ser un obrero, no una estrella que apenas se dedica a empujarla para el gol. 

Ricardo Gareca se equivocó en el planteo táctico, en la elección de los titulares. Ningún concepto o información proporcionada durante su gira europea de casi un mes se vio plasmado en el partido. Nada. Peor aún, no hubo mea culpa. Tras el partido, siguió insistiendo en que la selección peruana jugó bien por momentos. Hoy, padece por sus contradicciones. Padece porque fue contratado para llegar a Rusia 2018 y no para iniciar un proceso de recambio. Y el presente exigía un seleccionador con la suficiente experiencia como para saber lidiar con equipos cortos. Este martes, la selección peruana saldrá al Centenario con siete cambios producto de una falta de planificación enorme. Aunque en el fútbol todo es posible, lo más seguro es que Perú se llevará una derrota por errores principalmente técnicos. Gareca entonces debería dar un paso al costado.


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