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La resolución de la Corte Suprema que resolvió que el expresidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF),  sea extraditado a EE.UU. para afrontar un juicio por el delito de “asociación delictuosa de delincuencia organizada”, todavía no ha llegado al despacho del presidente Ollanta Humala para que tome la decisión final en sesión de Consejo de Ministros.

La sentencia del juzgado de extradición en perjuicio del expresidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Manuel Burga, emitida el pasado 2 de junio, está en la Dirección General de Justicia y Cultos del Ministerio de Justicia, y al ser un asunto reservado, nadie da explicación por la demora.

Según la acusación fiscal de Estados Unidos, Manuel Burga, como integrante de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), negoció de manera fraudulenta los derechos de transmisión de la Copa Libertadores y la Copa América, incurriendo en los delitos de conspiración de crimen organizado, lavado de activos y fraude electrónico. La legislación de Estados Unidos establece penas de hasta 20 años por el delito de conspiración para asociación ilícita para delinquir.

Asimismo, la Comisión de Fiscalización y Contraloría del Congreso de la República aprobó por mayoría el informe final sobre las presuntas irregularidades en la gestión del expresidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Manuel Burga, desde el 2002 hasta el 2014.

César Nakazaki, abogado del expresidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Manuel Burga, presentó un hábeas corpus para que declaren improcedente la resolución de extradición. Manuel Burga intentó pagar una fianza en Estados Unidos para afrontar el proceso judicial en libertad y evitar la extradición, sin embargo, la justicia de EE.UU. le pidió US$2 millones.