Lo quería como a un hijo. Reinaldo Rueda, director técnico de la selección ecuatoriana, lloró después de pedir un minuto de silencio por la muerte de Christian Benítez.
'Es una pérdida irreparable por la calidad de gente que tenía Christian, siempre con su don de mediador, de gran persona y de motivador, en el grupo es una baja sensible', comentó el DT de la tricolor.
Además Rueda recordó el profesionalismo y compañerismo de Benítez. 'El último detalle que hizo fue entrenarse cuando sabía que no podía jugar ante Argentina. Estuvo con el grupo en el camerino y se puso un chaleco para estar cerca de sus compañeros', agregó el estratega.