Tras la temprana eliminación del Mundial, Marcello Lippi, ahora ex entrenador de Italia, anunció su alejamiento de la selección azurra, haciendo una fuerte autocrítica y cargándose la responsabilidad del fracaso. "Asumo toda la responsabilidad por todo lo que pasó, porque si el equipo juega en un partido tan importante como el de hoy con miedo en las piernas, en su mente, si no puede jugar, es porque el entrenador no supo preparlos psicológica, técnica y tácticamente. Asumo toda la responsabilidad", dijo Lippi. "Estoy extremadamente, extremadamente desilusionado. Esperaba cualquier cosa, menos ver la actuación de la primera parte del partido", añadió Lippi, que llevó a Italia al título en Alemania 2006 y se despide en la primera fase cuatro años después.