El tenista español Rafa Nadal, derrotado tras una batalla épica a cinco sets ante el serbio Novak Djokovic en la final del Abierto de Australia, por 5-7, 6-4, 6-2, 6-7 (5/7) y 7-5, dijo que estaba decepcionado, pero que era una de sus derrotas "más satisfactorias". "No estoy contento por haber perdido la final, pero es una de las derrotas más satisfactorias de mi carrera. No tenía dudas de que iba a estar preparado para disputar un quinto set", comentó el español, número dos del mundo, que ya había perdido ante Djokovic la final del Abierto de Estados Unidos en 2011. Nadal destacó su nivel de juego y recordó que el año pasado Djokovic estuvo a un nivel inalcanzable en la primera parte de la temporada, por lo que lo equilibrado que estuvo este pulso hace pensar en un año más esperanzador. "Me ha gustado jugar este partido. Durante mucho tiempo he jugado mucho peor que él. Ha sido muy positivo, estoy muy satisfecho de mi espíritu y mi ánimo de esta noche. Lo importante es que en 2011 no jugué a menudo así, estoy en el buen camino, contento con mi nivel de estas dos semanas", afirmó. El mallorquín estimó que había estado "más agresivo" y que su servicio funcionó muy bien, por lo consideró que había sido una derrota dulce, que refuerza su confianza para los próximos desafíos.