Cuando el fútbol peruano pasa situaciones vergonzosas como la que acabamos de experimentar en estos primeros cuatro partidos de Copa Sudamericana 2016, con resultados, algunos de ellos bochornosos, como las goleadas sufridas en casa por la ‘U’ ante Emelec (0-3) y Municipal frente al Atlético Nacional (0-5), se vuelven a escuchar voces pidiendo la refundación del balompié nacional y todos, por supuesto, apuntando al trabajo con las divisiones menores.
Aquí todo será igual porque todos quieren cambiar todo, pero nadie cambia a los dirigentes, quienes son los responsables directos de esta pésima política que nos ha empujado al abismo y por la cual nos ven como lo peorcito de Sudamérica. Lo que es una incertidumbre es saber qué es lo que tiene que suceder para que un presidente de federación tome una actitud valiente y termine con tantos años de frustraciones y fracasos.
Está claro también que más responsables que la gente de la Videna, que jamás dictó las pautas para salir del hoyo, son los incompetentes que manejan los clubes, porque tratan desde siempre el tema de menores como un tema subalterno, al cual no le ponen el interés ni el debido respeto que merecen los chicos que llegan con condiciones, son diamantes a los cuales jamás se les logra pulir. Y porque además prostituyen la labor del fútbol de menores con las benditas academias, que son una máquina de arrebatarle dinero a los padres de familia.
El fútbol peruano seguirá siendo un pretexto para gritar nuestras frustraciones, al menos sirve de catarsis. Seguiremos tocando fondo porque los que manejan la pelotita -como decía el maestro ‘Vides’ Mosquera- son unos perfectos indocumentados.
#Rio2016: Zac Efron pasa la noche en cuarto de popular atleta [FOTO] https://t.co/nATrNh207V pic.twitter.com/FphnzX1fPP— Diario El Bocón (@elbocononline) 12 de agosto de 2016