En medio de la fiesta que se desató en el campo de juego y que luego siguió en el vestuario, Wilmer Aguirre buscó estar aislado un minuto. Tenía que agradecerle a su papá que está en el cielo. Sabe que desde arriba siempre le da una manito. Por eso, cuando el centro preciso de Fernández encontró su cabeza entendió que era un mensaje de su viejo para hacer explotar a todo el pueblo aliancista. "La estuve buscando todo el partido y sobre el final felizmente se dio, pero más alla de mi gol, lo más importante es que se ganó y estamos en la final, eso es lo más importante. Pero estoy seguro que el más feliz con todo esto es mi viejo, que desde el cielo siempre me lanza una ayudita y ahora me puso este centro para el gol", confiesa. Ayer el "Zorrito" fue el responsable que Chimbote cambie su tranquilidad por el alboroto que se armó por las calles. "Este a sido un primer paso, ahora debemos trabajar duro porque el partido ante la 'U'. No será fácil. Si queremos ganar tenemos que hacer un doble esfuerzo. Al menos, de tantas veces que busqué el gol, una tenía que entrar y felizmente se dio. Ahora todos regresamos felices y contentos a Lima", culminó.