El Chino Rivera vio gracias a la luz de un distinto amanecer y gritó al fin la victoria 2-1 que, un día antes, la oscuridad del apagón en el barrio de la Quintana, donde se ubica el estadio Mansiche, postergó que el elenco trujillano consolide su triunfo momentáneo. El Chino Rivera habló claro con sus jugadores, para que no sólo mantengan el 2-1 sobre Melgar, sino también el dominio del partido, como lo hacían el sábado. Los poetas entendieron que Melgar debía sentir un desgaste extra. Y que por nada del mundo deberían dejar que los mistianos aprovechen la suspensión del partido para recuperarse. Vallejo rotó el balón, lo controló, dominó el partido y atacó cuando pudo. Melgar no encontró el camino por falta de ideas. »La mejor volante Lo mejor de Vallejo fue su volante. Nakaya, Casas, Cazulo, y Faiffer, tocaron y Rossel con Demus estaban a la expectativa. La visita no tenía contundencia. Meza Cuadra posó solitario y Melgar hizo poco por empatar y no era el equipo enchufado que empezó ganando el sábado cuando el Torito anotó a los 5 minutos del primer tiempo, luego Demus empató a los 9, y volteó Rossel al minuto 12. Vallejo así no tenía pierde.///