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La rabia del hincha de Sporting Cristal es justificada. Y es que no encuentra explicaciones para este declive en el rendimiento del equipo en esta parte del año.
Sporting Cristal empató 1-1 ante Academia Cantolao y ve cómo, cada fecha, el tren del primer lugar del Clausura se aleja y se aferra al tema de la Tabla Acumulada (están segundos con 42 unidades) para obtener un cupo para las semifinales por el título nacional.
El inicio del cotejo fue complicado para los celestes, ya que el ‘Delfín’ los neutralizó y tuvo en Sandro Rengifo a su principal arma en la ofensiva. El diminuto delantero tuvo una ocasión clara para anotar, pero perdió el duelo con el arquero Renato Solís, quien evitó el primer tanto (25’).
La desesperación del técnico Claudio Vivas era evidente y movió sus piezas en el medio sector para zafarse de la presión.
Colocó a Horacio Calcaterra junto con Jorge Cazulo en la primera línea de volantes y mejoró algo el equipo, pero no lo suficiente para abrir el marcador en el Alberto Gallardo. La primera mitad terminaba 0-0 y muchas emociones nos deparaba el complemento.
Alegría y dolor
La segunda etapa tuvo al equipo local como protagonista tras el ingreso de Carlos Lobatón por Kevin Sandoval. ‘Loba’ le dio mayor claridad para gestar jugadas de ataque y el ingreso de Christopher Olivares por Martín Távara mayor profundidad en la ofensiva.En una contra mortal, Cristian Ortiz lanzó un pase para Cristian Palacios, quien habilitó a Olivares para poner el ansiado 1-0 (23’).
Eran los mejores momentos de los dirigidos por Claudio Vivas e incluso gozaron hasta de tres ocasiones para marcar. Primero, una nueva chance del ‘Zancudito’, luego Brandon Palacios y, después, Jorge Cazulo, pero la fortuna les negó gritar gol.
En una de las últimas jugadas del duelo, los chalacos lograron el empate con un impresionante disparo de Christian Sánchez 1-1 (42’).
Tras la eliminación de la Copa Sudamericana y la Copa Bicentenario, los celestes siguen en caída libre y nada parece detenerlos. Sigue la deuda a nivel de juego y así es muy difícil pelear por cosas mayores.
