Luis Garay fue el árbtiro de la línea de meta en la semifinal entre Sporting Cristal y Ayacucho FC. (Foto: GEC)
Luis Garay fue el árbtiro de la línea de meta en la semifinal entre Sporting Cristal y Ayacucho FC. (Foto: GEC)

Sporting Cristal superó por 4-1 a Ayacucho FC en un partido en el que las polémicas no faltaron. La mano de Gianfranco Chávez dentro del área que el árbitro Diego Haro no cobró, fue una de ellas y, hasta el día de hoy, se sigue comentando.

A los 12 minutos de juego, una carga ofensiva de los ‘Zorros’ en los pies de Carlos Olascuaga, generó que el balón impacte en la mano del defensor celeste. Los jugadores ayacuchanos pidieron penal pero los reclamos no prosperaron.

Luis Garay, árbitro que se encontraba al lado de la línea de meta, decidió realizar su descargo días después del partido y explicó por qué no dio aviso a Haro para que cobrara el penal a favor de los dirigidos por Ameli.

Nosotros los árbitros tenemos que tomar decisiones rápido con la única toma (ángulo) que tenemos en ese momento, no podemos suponer o inventar alguna otra imagen, y también debemos saber que -a diferencia del árbitro principal- el juez de gol no puede tener mayor movilidad en el campo, ya que su función principal es la “línea de gol”, explicó Garay.

“Entonces quiero aclarar que sí observé la “mano”, sin embargo, no tenía el ángulo adecuado para saber qué tan separada se encontraba del cuerpo y precisamente ahí está la diferencia entre una mano sancionable y una que no se debe sancionar. La mano sancionable es aquella que se encuentra de manera “antinatural”, “ocupando un mayor espacio””, agregó.