Herido en la rodilla derecha, pero mucho más en el alma, el golero blanquiazul Salomón Libman tampoco pudo contener su desazón tras perder el título nacional ante los cremas. De nada sirvió aguantarse el dolor y no abandonar el campo para intentar darle vuelta al resultado. Luego de dañarse la rodilla, su gesto de sufrimiento supuso que saldría del campo para que ingrese el juvenil Jefferson Romucho, empero, Salomón, consciente que esto podría significar el descalabro ante la juventud e inexperiencia del guardameta, decidió continuar, poniendo en riesgo su integridad física. Por eso su tristeza. "Se acabó la historia. Luchamos hasta el final y no nos alcanzó para darle vuelta a la situación. La 'U' aprovechó los buenos momentos que tuvo en el partido. Lo que se vivió en el vestuario fue realmente doloroso. Nos queda el consuelo que no jugamos mal, que lo dimos todo, sin embargo, no alcanzó, no fue suficiente. Siento mucha tristeza", culminó.