Escribe Giovanna Vásquez
Diego Guastavino jugará una final por segunda vez, pero ahora será diferente, por el amor que le ha agarrado a la camiseta de Universitario.
Sin embargo, pensar en viajar a casi 4 mil metros de altura pone un poco nervioso al volante crema. Esto se debe a que a Guastavino nunca le cayó muy bien la altura, pero está dispuesto a dejar todos los malestares de lado para poner todo en el campo y así lograr un buen resultado para la U.
"En el campo no se siente mucho, sí un poco la noche anterior me siento algo mareado, pero esto se deja a un lado porque vamos a jugar una final. Vamos apretar los dientes y saldremos con todo", aseguró Guastavino.
Confía en los jóvenes
El uruguayo sabe que Real Garcilaso será un rival muy duro, con mucha experiencia, pero no será imposible ganarles. Es más, confía en los más jóvenes del equipo.
"El rival tendrá jugadores con mucha experiencia, pero nosotros daremos pelea y estoy convencido de que podemos ganar. Tenemos un equipo con muchos jóvenes y esa ha sido la clave para lo que hemos logrado, vamos a seguir demostrando que estamos haciendo las cosas bien", finalizó Guastavino.