La interna de la ‘U’ es una caldera. El problema va más allá de la producción futbolística, radica en los vestuarios. Era una bomba de tiempo. Por eso, el último viernes hubo un cortocircuito entre Antonio Gonzales y el uruguayo Carlos Grossmüller, que casi termina en bronca. Para el administrador Raúl Leguía, el colombiano Luis Fernando Suárez deberá hacer pesar su condición de líder, como entrenador, y tomar decisiones.
“Si hubo un conato de bronca o no, el técnico es el encargado de hacer los correctivos. Él tomará las decisiones en el equipo. Con Suárez se ha visto que Universitario juega con hombres y no con nombres. Nadie está seguro en el puesto, menos irreemplazable. Siempre hay calenturas cuando el equipo no gana. La Administración le brinda su total respaldo en su trabajo”, aseguró el funcionario.
Además, el equipo está en evaluación. Los grandes dependen de resultados, cuando no se dan siempre ruedan cabezas.
“Acá todos estamos en constante evaluación. El equipo debe comenzar a ganar. Suárez es un técnico de mucha experiencia, confiamos en su trabajo y en que cambiará las cosas, pero esto es un proceso. De la noche a la mañana no podrá dar soluciones inmediatas”, concluyó el administrador.
DATO
El entrenador Luis Fernando Suárez viajó ayer con la reserva de Universitario a las 5:00 a.m. rumbo a Cajamarca. En dicha delegación también partió Raúl Fernández, quien no será tomado en cuenta como titular esta tarde cuando los cremas visiten al UTC. Los merengues vuelven hoy de Cajamarca por la noche y entrenan mañana en el Monumental.