Escribe Javier Padilla
En Matute la situación está que quema. EL BOCÓN está en condiciones de asegurar que hay varios jugadores del primer equipo que están incómodos con el sistema de rotación que ha empleado el técnico Guillermo Sanguinetti en los últimos partidos del Apertura.
El Topo, desde hace algunas fechas, deja en el banco a varios futbolistas que son habituales titulares, como es el caso de Roberto Guizasola, Luis Trujillo, Israel Kahn, Koichi Aparicio, Josimar Atoche, entre otros.
Sanguinetti quiere ensayar nuevas variantes en su esquema táctico, pero fracasa en el intento. Alianza, por ejemplo, jugó con una línea de tres defensores en Moquegua y perdió.
Otro factor que incomoda a la interna es que el técnico íntimo apuesta al cien por ciento por Gabriel Costa en la zona de las ideas.
Si bien es cierto, el volante uruguayo marcó en las primera fechas del torneo, luego su rendimiento dejó mucho que desear y hasta la fecha no es, ni por asomo, el conductor que necesita Alianza Lima para llegar lejos esta temporada.
El profesor ya no sabe qué hacer, cambia y cambia de jugadores, es la queja habitual en el vestuario blanquiazul.
Bolsa con hueco
El problema de los íntimos también está en la bolsa de minutos. Hoy, Alianza está al debe. El equipo necesita sumar en cada partido mínimo 90 minutos. Los Sub-20, Aldair Ramos y Bryan Canela son las cartas de Sanguinetti. Ambos han jugado con poca fortuna. Su inexperiencia les pasa factura.