Ventiséis años han pasado desde que EL BOCÓN abrió sus ojos y cambió la historia del periodismo deportivo nacional. Era el 9 de marzo de 1994, tiempos difíciles para el fútbol peruano porque la selección había consumado un nuevo fracaso camino al Mundial de Estados Unidos y los equipos peruanos luchaban por avanzar lejos en la , algo que finalmente no ocurrió.

Los tropiezos en el ámbito deportivo y el descontento de la gente ante la ausencia de éxitos hicieron posible la gran acogida que tuvo este diario desde el momento en que vio la luz. Y una vez que salimos a circulación, nadie nos paró.

Fuimos (y aún lo somos) la voz que el hincha siempre deseó. Llevamos la información con un estilo irreverente y definido, que sacó sonrisas en ocasiones y provocó escándalos en otras. Poco a poco fuimos entrando en los hogares del pueblo peruano y fuimos parte de su día a día. No había canillita en las calles que ofreciera su diario EL BOCÓN a la gente interesada por saber lo último de su equipo favorito.

¡Somos el bocón!

Y así fuimos creciendo, de la mano de grandes profesionales que fundaron esta ‘jetita’ y aquellos que pasaron para dejar huella y marcar a las futuras generaciones de periodistas. Nombrarlos sería interminable, pero son parte inamovible de nuestra historia.

Hoy, la realidad es otra y algunos rostros han cambiado. Convivimos con la tecnología y la inmediatez de la redes sociales, y estamos en plena convergencia; pero mantenemos la esencia que nos vio nacer y que nos diferencia del resto de diarios. Porque nacimos únicos y seguimos siendo únicos.

Por ello, para aquellos que fueron testigos del nacimiento de EL BOCÓN, aquellos que pasaron por la sala de redacción y dejaron escuela, aquellos que fueron parte de la formación de nuevos periodistas y aquellos que visten hoy la camiseta de este diario, ¡felices 26 años y que vengan muchos más!