Alianza Lima y el arte de reinventarse con jugadores del descenso

Alianza Lima recibió una paliza en el Monumental. Universitario de Deportes sencillamente lo pasó por encima. Desarticuló y dejó, casi en ridículo, la puesta de Pablo Bengoechea para el 2017. Delató la crisis individual de alguna de sus figuras que, aunque puede ser solo un mal partido y nada más, tienen antecedentes de rendimientos dispares. Una irregularidad que da paso al cuestionamiento. Y es que, difícilmente una presentación como la del sábado puede llevar a confiar ciegamente en jugadores cuyo presente no es el mejor. El primer gran cuestionamiento apunta al mediocampo: con Rinaldo Cruzado y Luis Ramírez, Universitario de Deportes se llevó un banquete. Otra posición que simplificó la llegada de los goles fue la de Alejandro Hohberg. Todos absolutos en la idea de Pablo Bengoechea, pero con demasiadas deficiencias en su juego.

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Y no es de un partido. Como ante Independiente y Juan Aurich, el rendimiento individual dejó dudas. Solo que ante Universitario de Deportes, todos los errores los hizo gol Alianza Lima. En especial Alejandro Hohberg, titular absoluto en los últimos tres partidos y en cada uno con un rendimiento aún menor que el anterior. Sin brillo, sin proyección, sin verticalidad, sin interés por la marca. El volante no ha logrado consolidarse en el juego, pero sigue siendo titular como una apuesta ciega de Pablo Bengoechea. Y ojo, su rendimiento irregular y trotón no es de ahora. Recordemos que llega de hacer una pésima campaña en el 2016 con César Vallejo, club con el que finalmente se fue al descenso.

Otro jugador particularmente afianzado en el once por Pablo Bengoechea es Rinaldo Cruzado, mediocampista que ayer fue superado por todos lados y sin brillo ni capacidad para reaccionar ante Universitario de Deportes. El mediocampista no luce, nos revienta. Hace la justa y, a veces, con eso le alcanza. El ante ante Universitario de Deportes le faltó todo. Y ahí otro detalle: al igual que Hohberg, llegó a Alianza Lima tras una temporada para el olvido con César Vallejo, equipo con el que también se ganó merecidamente el descenso. 

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Luis Ramírez, la otra gran apuesta de Pablo Bengoechea en Alianza Lima, muestra un jugador que también ahce la justa. Su rendimiento, además de irregular, viene siendo pausado, discreto. Ya tuvo un 2016 bastante chato, luego de volver al fútbol de una larga para. Este 2017, anima a buscarle una variante con mayor ganas de crecimiento.

Complicada apuesta de Pablo Bengoechea, que tiene sin embargo en esos jugadores la experiencia que puede resultar fundamental para revertir situaciones complicadas. Alianza Lima urge levantarse y dejar atrás la triste historia del clásico. No hay tiempo, porque ya viene Independiente.

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