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El año que ganó todo con el Barcelona,  perdió hoy su tercera final con la selección argentina y se despidió de la  con un sólo gol, de penalti, y una nueva actuación deslucida.

 sólo mostró su genio en las semifinales de la  y el resto del torneo fue intermitente, errático y estuvo muy lejos de su mejor versión. En la final contra Chile no consiguió zafarse del fuerte marcaje de Gary Medel y perdió muchas posesiones por retener demasiado el balón.

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 ya se había quedado con la miel en los labios en la final de la Copa América de 2007 y en la del Mundial de 2014, hoy alargó su racha de sinsabores con la selección y se fue del Estadio Nacional de Santiago con cara de incredulidad.

La clase de  sólo apareció en el minuto 90, cuando lanzó un contraataque a la carrera y dio un gran pase a Lavezzi para que este centrara a Gonzalo Higuaín, quien llegó tarde por muy poco y remató por fuera de la red.

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En el divorcio de  con el gol durante esta  también tuvieron mérito los porteros, como la excepcional parada que hizo el colombiano David Ospina con la que le sacó un remate de cabeza a bocajarro en los cuartos de final.

Gran diferencia con Barcelona, en la temporada que acaba de concluir  marcó 58 goles en 57 partidos y ganó los tres torneos más importantes, la Liga, la Copa del Rey y Champions League.

Con la elástica albiceleste,  sólo se colgó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, pero sigue sin un título al nivel de los cuatro premios de mejor jugador del mundo que logró en cuatro ocasiones (2009, 2010, 2011 y 2012).

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— Actual Fútbol (@ActualFutbol)

— Diario El Bocón (@elbocononline)

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